Se profundizó la caída del empleo en septiembre
Según los datos del Sistema Integrado Previsional Argentino ( SIPA), en agosto pasado había 12.106.981 trabajadores registrados, 125.041 menos (-1%) que un año atrás. Con respecto a julio, sin embargo, la variación desestacionalizada fue de 0,1% o 9700 trabajadores registrados más, "el primer dato positivo en cuatro meses", afirmaron fuentes del Ministerio de Producción y Trabajo.
Según los datos del Sistema Integrado Previsional Argentino ( SIPA), en agosto pasado había 12.106.981 trabajadores registrados, 125.041 menos (-1%) que un año atrás. Con respecto a julio, sin embargo, la variación desestacionalizada fue de 0,1% o 9700 trabajadores registrados más, "el primer dato positivo en cuatro meses", afirmaron fuentes del Ministerio de Producción y Trabajo. El escenario remite al contexto anterior a las PASO, con una economía que mostraba tibios signos de mejora hasta la devaluación posterior a las elecciones, que profundizó la recesión.
Los datos preliminares de septiembre muestran ese deterioro en el sector privado formal. Ese mes se produjo una caída interanual del 2,6%, aunque la situación fue peor en el Gran Buenos Aires, con una baja del 2,9%. Construcción e industria manufacturera fueron los sectores más golpeados, con caídas del 10,5% y 4,2%, respectivamente.
En sus valores interanuales, en agosto hubo 115.700 asalariados registrados menos que en igual mes de 2018. También cayó la cantidad de trabajadores no asalariados, en 9300 personas menos que un año antes.
Los asalariados registrados privados fueron 140.000 menos en el mismo período. Hubo bajas en todas las ramas de actividad menos enseñanza, agricultura, ganadería y pesca y hoteles y restaurantes. Comercio y reparaciones perdió 43.400 trabajadores en un año y las industrias manufactureras, 56.700.
El sector público, por su parte, creció un 0,5% en términos interanuales, con 16.200 trabajadores más.
La Encuesta de Indicadores Laborales (EIL), en agosto de este año, mostró máxima cautela en el mercado laboral, con 9 de cada 10 empresas con planes de mantener su personal (no despedir ni aumentar) en los próximos tres meses. En septiembre también refleja la voluntad de las empresas de no innovar. En septiembre, el 90,9% de las empresas no anticipa cambios en su dotación de personal. El 4,3% espera aumentar su dotación, pero el 4,8% espera disminuirla. "Se trata de un mercado laboral expectante y con baja rotación", afirman en el ministerio.
Empleo insuficiente
Desde agosto de 2016 a agosto de este año se creó empleo, pero menos de lo que se necesita para incorporar al mercado laboral a las nuevas generaciones. "Todos los años ingresan al mercado laboral una cantidad de jóvenes que buscan empleo. Si no se genera trabajo, las nuevas camadas no se incorporan al mercado laboral", explica Víctor Beker, exdirector de Estadísticas Económicas del Indec y actual director del Centro de Estudios de la Nueva Economía de la Universidad de Belgrano.
"Hubo creación de empleo formal entre mediados de 2016 y 2017 y se prolongó hasta la crisis de abril y mayo de 2018. Por otro lado, hubo destrucción de empleo en el primer semestre de 2016 y a partir de mayo de 2018. Lo que se creo de empleo, se perdió", aclara.
Según el informe Situación y Evolución del Total de Trabajadores Registrados elaborado por el Ministerio de Trabajo, Empleo y Seguridad Social, en agosto de 2016 había 11.967.396 trabajadores registrados, prácticamente la misma cantidad de trabajadores registrados que en el mismo mes del año anterior.
Es decir, a números actuales, hay 138.604 trabajadores registrados más en la actualidad. Sin embargo, "la población económicamente activa (PEA) crece a razón de 350.000 personas por año. Calculando unos 50.000 jubilados por año, se requieren 300.000 nuevos puestos por año", dice Beker.
En agosto 2016, había 6.146.000 asalariados del sector privado, y los últimos números oficiales muestran que hoy hay 6.073.000. El empleo asalariado privado registrado está estancado desde 2012, con algunas leves variaciones en estos años que no mueven demasiado la aguja. En agosto de 2014, por ejemplo, había 6.077.000 asalariados registrados en el sector privado, y hoy, 6.073.000.
El economista y titular de Idesa, Jorge Colina, observa que los sectores que crecieron fueron el empleo público, el servicio doméstico y los monotributistas sociales. "Hay un importante desafío para la seguridad social, ya que el empleo doméstico y los monotributistas hacen aportes muy reducidos, mientras que cae la cantidad de trabajadores que la financian".
Para reactivar el empleo, advierte, la economía tiene que crecer. "Para ello hay que bajar sustancialmente la inflación. El año que viene, si se hacen las cosas bien y con suerte, bajará la inflación, pero no hay que esperar un aumento del empleo asalariado privado registrado", opina.
El sector público, por su parte, con un Estado "sobredimensionado" según distintos especialistas, contaba con 3.113.092 asalariados en agosto de 2016 y en agosto de 2019 tiene 3.186.000 empleados.