La consultora Ecolatina advirtió que la deuda pública será uno de los mayores problemas para el Gobierno de Alberto Fernández, ya que actualmente la misma representa cerca del 90% del Producto Bruto Interno (PBI) de la Argentina, entre obligaciones en manos del sector privado, organismos financieros internacionales y otras agencias estatales.
En este marco, la consultora resaltó que la próxima administración deberá definir rápidamente una estrategia para encarar el problema porque difícilmente logre maximizar el crecimiento" del país en poco tiempo.
A través de un informe, Ecolatina señaló que durante la gestión de Fernández vencerán alrededor de la mitad de los compromisos" que tiene el Estado con sus acreedores, a los que "deberán sumarse el pago de intereses de estas deudas.
El documento detalla que dentro de esos vencimientos se incluye la devolución de buena parte del préstamo recibido del FMI (Fondo Monetario Internacional) que deberá pagarse -conforme al cronograma vigente- entre 2022 y 2023.
Además, el Tesoro deberá desembolsar en torno a US$ 38.000 millones (cerca del 10% del PBI) hasta junio" del próximo año, y más de 20.000 millones de dólares de ese monto serán para cubrir "deuda relevante, por lo que consideraron importante las medidas que tome la gestión del Frente de Todos para minimizar los daños que generen esas obligaciones.
Alberto Fernández adelantó en varias oportunidades que su intención es cumplir con todos los cronogramas de cobros, aunque advirtió que su Gobierno no va a poder hacerlo "en las condiciones en las que está la economía argentina.
La economía se tiene que recuperar, volver a producir y volver a exportar. De ese modo tendrá dólares para hacer frente a las obligaciones. Hoy nada de eso ocurre. Llevamos dos años consecutivos de caída del consumo, explicó el presidente electo durante una entrevista que mantuvo con el prófugo ex mandatario de Ecuador Rafael Correa.
En este sentido, Fernámdez confió en que va a tener una negociación cierta con el FMI cuando asuma al frente de la Casa rosada y va a poder explicar la situación en la que se encuentra el país financieramente.
El mundo tiene que entender que no somos Macri. Nosotros no mentimos. No podemos pagar en las condiciones en las que está la economía argentina, agregó.
Al respecto, Ecolatina también observó que con el riesgo país por encima de los 2.000 puntos, no será posible refinanciar estas deudas, por lo que se preguntó si el Gobierno podrá conseguir el ahorro? para cumplir con los vencimientos.
"La recesión, los límites (económicos y político-sociales) a recortar el gasto y elevar la presión tributaria y el alto peso de la deuda en moneda extranjera abren interrogantes sobre la capacidad de pago del stock existente, se remarcó en el documento.
Por otra parte, la consultora opinó que el cierre absoluto de los mercados de crédito refleja las dudas que tienen los inversores" sobre el grado de solvencia de la Argentina y sostuvo que si no se puede refinanciar las obligaciones (por lo menos, hasta convencer a los acreedores de lo contrario), Fernández "tendrá tres posibilidades: elevar la presión tributaria, exigirles un ajuste mayor a las prestaciones públicas o modificar las condiciones de pago de los pasivos.
Por último, el informe consideró que el régimen impositivo actual y los contratos vigentes de actualización de prestaciones sociales, salarios y servicios públicos son incompatibles con el pago en tiempo y forma" de las deudas, por lo que "alguno de estos agentes deberá perder parte de los recursos que espera obtener.
De cara al primer tramo del próximo Gobierno, Ecolatina sostuvo que teniendo en cuenta la magnitud del problema en el corto plazo, es probable que encaren un programa que combine mayor contracción fiscal con una reestructuración de los pasivos. Así, el costo de este ajuste se repartiría entre las cuentas fiscales y los bonistas.