Las primeras declaraciones públicas y la presentación del gabinete económico de la cartera que encabeza Martín Guzmán fueron bien recibidas dentro de la City. Analistas y operadores del mercado destacaron ayer la moderación del discurso y calificaron como una buena señal para el futuro financiero los dichos del flamante ministro de Economía relativos a las negociaciones tanto con el Fondo Monetario Internacional como con los bonistas privados. "Ya se iniciaron las negociaciones con el FMI y estamos empezando el diálogo con los acreedores", expresó.
Pese a que, con la incertidumbre y volatilidad actual, es difícil anticipar a ciencia cierta cuál será la reacción de los mercados, la mayoría de los analistas consultados por El Cronista coincidieron en que esperan una respuesta positiva, ya que -hasta el momento- se daba por descontado un escenario menos favorable para los acreedores. Algunos se mostraron más escépticos, ya que faltaron definiciones sobre los vencimientos en el corto plazo.
Diego Martínez Burzaco, de MB Inversiones, señaló: "Uno podría coincidir con el diagnóstico y hacia dónde se busca ir. El tema es cómo se logran los objetivos". A la vez, el economista destacó tres conceptos de la presentación como claves para llevar un poco de tranquilidad a los inversores: "Habló de un plan macroeconómico integral, con una coordinación entre la política monetaria y la política fiscal. También entre líneas se pudo ver que el fisco no tiene demasiado margen para financiarse con emisión y que tiene los mercados de crédito cerrados. Y después destacaría la búsqueda de una solución rápida, amigable y constructiva con los acreedores, no ir a confrontar y que esto no sea un elemento desestabilizante para la economía, más allá de la fragilidad que estamos viendo hoy en día".
Un operador de bonos coincidió en que el mensaje de Guzmán fue más conciliador de lo que se descontaba, pero advirtió: "A la pregunta sobre si va a pagar o no, la repuesta fue demasiado esquiva. Era lo único importante para todos los que estamos en los mercados: qué va a pasar con los vencimientos en dólares y en pesos de los próximos tres meses. Aunque todos estemos de acuerdo en el diagnóstico, el mercado quiere ver los pesos y los dólares. Si finalmente paga los próximos vencimientos y espera un período de consulta con los acreedores, los bonos van a subir, porque está descontado un escenario mucho peor. Pero aún no quedó claro", dijo.
En esta misma línea opinó Diego Falcone, de Cohen. "Dejó bastantes interrogantes, teniendo en cuenta que no falta mucho, apenas dos semanas para que se tengan que hacer los pagos de intereses de los bonos Global 2117 y Discount: dos instrumentos en manos de inversores tanto internacionales como de ley local. Esperemos que aceleren con las novedades".
Entre las definiciones que sí se dieron, Mariela Diaz Romero, de Econviews, destacó la creación del comité con ex subsecretarios de finanzas: "Parece una buena idea para buscar apoyo y asesoramiento de profesionales que fueron parte de otras reestructuraciones", dijo.
Su colega, Martín Vouthier, de Eco Go, sumó: "Confirmó lo que se venía especulando, respecto a la importancia de crecer para después poder pagar. Y también con pedirles un esfuerzo a los acreedores sabiendo que con este nivel de riesgo país, con el mercado cerrado, y con una economía en recesión no se puede pagar. Va a ser muy importante la propuesta de renegociación y el programa económico a la hora de determinar el éxito de la reestructuración".
Con respecto a la cuestión cambiaria, y pese a que Guzmán no adelantó cambios en el control de capitales, Matías Rajnermann de Ecolatina, afirmó: "En agosto se priceó un dólar y un riesgo país pensando que se iba a una política expansiva sistemática mayor a lo que se vio en 2012 y 2013 y post 2015. Si se hubiera sabido que este iba a ser el primer discurso del ministro de Economía de Alberto Fernández, el dólar no llegaba a los $60. Habrá que ver cuánto se puede materializar. Entiendo que los mercados no lo van a tomar a mal".