El FMI juega fuerte para que la Argentina logre un acuerdo con los bonistas
Tras el apoyo que el ministro Martín Guzmán recibió el miércoles de parte del empresariado argentino respecto de la renegociación de la deuda, el FMI sostiene ahora que al acuerdo le faltan solo detalles. Guzmán: "Un acuerdo exitoso es el que cuide a la Argentina"
El Fondo Monetario Internacional (FMI) está particularmente atento a las negociaciones que por estas horas llevan adelante el Gobierno y los acreedores. Dado el contexto, el organismo mantuvo conversaciones con el ministro de Economía, Martín Guzmán, y su equipo, al tiempo que también dialogó con los grandes grupos de bonistas.
El objetivo es simple, trabajar para que la Argentina no entre en default.
"Como ya hemos mencionado, respecto a las negociaciones bilaterales entre la Argentina y sus acreedores privados, tenemos la esperanza de que se pueda llegar a un acuerdo con los acreedores que reestablezca la sostenibilidad de la deuda en Argentina y allane el camino para un crecimiento económico fuerte e inclusivo, con alta generación de empleo", dijo oficialmente el FMI a este diario.
El Gobierno negocia contra reloj un acuerdo con los acreedores. El miércoles, la buena noticia que recibió Guzmán fue que un grupo de importantes empresarios, entre los que se encontraban Paolo Rocca (Techint), Luis Pagani (Arcor) y Miguel Galuccio (Vista) apoyó explícitamente las negociaciones que lleva adelante el ministro. Ahora, la noticia se traslada precisamente al apoyo que el Gobierno recibe del propio FMI.
En off the record, un asesor que trabaja en el FMI aseguró que "la visión del organismo es hoy 'híper pragamática' y que estando tan cerca del acuerdo, la Argentina no debe permitir que por detalles técnicos se caiga toda la negociación".
La palabra 'flexibilidad' es que la se menciona en los pasillos del Fondo en Washington. Llegadas las instancias decisivas de la negociación, desde el directorio del FMI entienden que "en una deuda de solo el 17% del PBI, debería primar el criterio de aceptabilidad de la propuesta. Es la única manera de que la Argentina recupere acceso al mercado", asegura el asesor del Fondo.
Desde el FMI se mantuvieron conversaciones extremadamente confidenciales con funcionarios argentinos y con los jugadores más relevantes de los fondos de inversión, con el objetivo de acortar las distancias y que se llegue a un acuerdo. "El Fondo está trabajando mucho para que la Argentina no caiga en default, es uno de los principales interesados de que eso no suceda", explica la fuente en off del FMI.
"Hoy la prioridad del Fondo es que la Argentina acuerde. Así podrá reiniciar mucho más rápidamente la recuperación después del coronavirus y no recostarse únicamente en la emisión monetaria como método de financiamiento", sostuvo el asesor del organismo.
En definitiva, el fondo está jugando sus cartas para evitar el default de su mayor deudor. Solo a modo de ejemplo, la Argentina se convirtió durante el gobierno de Mauricio Macri en el principal cliente del FMI al tomar préstamos por más de u$s 50.000 millones.
La Argentina entró en zona de default para las calificadoras de riesgo ya que hace una semana no pagó vencimiento de u$s 503 millones. De todos modos, los bonos subieron porque el mercado también cree que el acuerdo con los bonistas es posible.
El FMI, el aliado menos pensado, juega sus cartas para destrabar la deuda
El Fondo Monetario Internacional (FMI) presiona a los acreedores de la deuda de la Argentina para que rebajen sus pretensiones y logren un acuerdo con el gobierno de Alberto Fernández.
Desde el FMI se mantuvieron conversaciones extremadamente confidenciales con funcionarios argentinos y con los jugadores más relevantes de los fondos de inversión, con el objetivo de acortar las distancias y que se llegue a un acuerdo. Al mismo tiempo, el equipo económico que conduce Martín Guzmán, recibe el respaldo de destacados empresarios de la Argentina.
Si se tienen en cuenta el apoyo del FMI, organismo que le otorgó a la Argentina el mayor crédito de su historia, y el de los empresarios, donde la mayoría representa un considerable capital invertido en el país, el panorama, al menos en el plano de los respaldos, parece muy bueno para Guzmán.
El apoyo que falta es el de los bonistas. A última hora de ayer, el ministro volvió a hablar sobre la deuda. "Hoy venció un acuerdo de confidencialidad. Hay otro que aún está vigente. Con respecto al que venció hoy, el resultado es que nos hemos acercado pero aún hay un camino importante por recorrer. Nosotros presentamos unos términos de referencia que buscan acercarnos a un acuerdo que cuide a la Argentina. El grupo de acreedores llamado Ad Hoc se movió en la dirección correcta con respecto a su oferta previa, pero el movimiento fue corto, insuficiente para las necesidades del país. Esperamos seguir trabajando con los acreedores que componen ese grupo, que al día de hoy son quienes tienen una posición más alejada de las restricciones que enfrenta nuestro país".
La postura dura del gobierno argentino, aferrado a la sostenibilidad de la deuda, es obvio que no es lo que los bonistas desean. Pero los tiempos se agotan, y todos quieren una definición.
En los fondos, la pretensión es poder llegar a un acuerdo que les represente una ganancia futura considerable. Están dispuestos a ceder. De hecho, lo demostraron, pero está claro que la intención de los acreedores es cobrar lo más posible, lo antes posible. La postura no es discutible. No se trata de tener razón. Pero cuando se llegan a estas instancias lo que se tiene en cuenta es la mejor negociación, dentro de lo realizable. "Un acuerdo exitoso es un acuerdo que cuide a toda la Argentina", afirma el ministro.
La frase de Guzmán no es menor. Para el Gobierno, el acuerdo no puede ser a cualquier precio, al menos es lo que por ahora sostiene. Está claro que llegado el caso, entrar en default no va a convencer a todos. Los empresarios, por ejemplo y por sobrados motivos, pidieron evitarlo. El Gobierno quiere arreglar, los bonistas y el FMI también. ¿Hay alguien que no?
Guzmán: "Un acuerdo exitoso es el que cuide a la Argentina"
-¿El acuerdo con los acreedores será exitoso?
-Un acuerdo exitoso es un acuerdo que cuide a toda la Argentina
-¿Y eso qué implica?
-Que entendemos lo que esta negociación implica para todos los sectores de la economía. Viamo que recorrimos con Cecilia Todesca y Santiago Cafiero es una empresa de calzado que hace todo el proceso productivo en su planta de Mataderos, desde el diseño hasta el empaquetado. Es una pyme que da trabajo, agrega valor a su producción y apuesta a la innovación aún en este contexto de pandemia. Viamo es una de las 300.000 empresas que recibió la ayuda del Estado para pagar los salarios de sus 260 trabajadores. Es reconfortante ir a las fábricas y ver, y escuchar, que a pesar de la difícil situación, las medidas que tomamos efectivamente sostienen el empleo y protegen la producción
-¿Alcanza con la ayuda del Estado?
-Tenemos un Estado presente que en una situación de emergencia sin precedentes, toma medidas de manera rápida. Hay sectores que no pueden esperar. Hoy Argentina tiene decisión y un liderazgo firme del presidente Alberto Fernández. Y nos necesita unidos y solidarios.
A última hora de ayer, Guzmán volvió a hablar sobre la deuda. "Hoy venció un acuerdo de confidencialidad. Hay otro que aún está vigente. Con respecto al que venció hoy, el resultado es que nos hemos acercado pero aún hay un camino importante por recorrer. Nosotros presentamos unos términos de referencia que buscan acercarnos a un acuerdo que cuide a la Argentina", sostuvo
Además, el titular de Economía resaltó que "el grupo de acreedores llamado Ad Hoc se movió en la dirección correcta con respecto a su oferta previa, pero el movimiento fue corto, insuficiente para las necesidades del país. Esperamos seguir trabajando con los acreedores que componen ese grupo, que al día de hoy son quienes tienen una posición más alejada de las restricciones que enfrenta nuestro país".