El déficit primario será el más alto desde 1976 y el fiscal, el más amplio desde 1983
El desequilibrio primario llegaría a 6,5% del PBI a fin de año y el financiero, a 8,7%. El "gasto Covid" fue de 4,9% y el mercado se ilusiona con bajar el rojo a un 3,5% el año que viene, si hay decisión política.
El Sector Público No Financiero de la Argentina cerrará 2020 con un déficit primario equivalente a cerca de un 6,5% de su Producto Bruto Interno (PBI), el más alto en 44 años -en 1976 fue de 8,49%-, y tendrá un rojo fiscal de aproximadamente un 8,7%, el más amplio en 37 años -en 1983 fue de 10,38%-, de acuerdo a las estimaciones que hacen en el Gobierno y las series estadísticas históricas de la Oficina Nacional de Presupuesto (ONP), a las que accedió este diario.
La recuperación de la recaudación tributaria, por las reaperturas en distintas actividades, y la moderación del gasto en el último tramo del año, por la progresiva desaparición de los programas de asistencia frente a la pandemia, disminuyeron la previsión oficial de terminar el año con un déficit primario (sin contar el pago de intereses de la deuda pública ni los desequilibrios de provincias y municipios) de 8,3% a 6,5%, según contaron fuentes oficiales a El Cronista .
Con el Presupuesto 2021 que marca un sendero de disminución a 4,5% del PBI el año próximo, en el Gobierno aseguran que el déficit que se acuerde con el Fondo Monetario Internacional (FMI) podría ser unas cuantas décimas menor, aunque no se animan a anticipar alguna cifra concreta.
En el mercado se ilusionan con lo mismo: que el rojo finalice más cerca de un 3,5%. Federico Furiase, de la consultora EcoGo, apunta que hay "inercia" fiscal que llevaría el déficit primario a esa zona, un punto porcentual menos que lo pautado (unos u$s 4000 millones). Los mismos números maneja Matías Rajnerman, economista jefe de Ecolatina.
"La decisión es política", aclaró el economista, en referencia a la viabilidad de implementar un ajuste en un año electoral, en un programa que, para achicar el desequilibrio, debería incluir un aumento de las tarifas de la energía y el transporte público en línea con la inflación, algo que hoy todavía no está en claro que se materialice efectivamente.
Noviembre tuvo el déficit primario más bajo desde que empezó la pandemia del nuevo coronavirus: 0,2% del PBI.
Y el resultado acumulado en once meses da negativo en un 5,3%, al tiempo que el rojo financiero suma 2 puntos más y se eleva hasta 7,3%.
En diciembre, como es habitual, se acelera el gasto por el pago de los aguinaldos y la suba de las jubilaciones.
Por este motivo, el Tesoro apeló el viernes 18 a pedir el giro de todas las utilidades disponibles restantes del Banco Central (BCRA).
El 18/12 el BCRA volvió a enviar asistencia al tesoro, fue en concepto de "Transferencias de utilidades" y por un monto de $54.982 millonesEn Diciembre la asistencia suma $254.982 millones y en el año $2.014.072 millones (TU+AT) pic.twitter.com/nhhQLjct3q
— Christian Buteler (@cbuteler) December 23, 2020
El analista financiero Christian Buteler señaló que la entidad monetaria transfirió los últimos $ 54.982 millones producidos por utilidades contables de 2019; el giro alcanza los $ 254.982 millones en el mes, que se suman a otros $ 90.000 millones de noviembre.
Así, la "maquinita" de la emisión monetaria totalizó la entrega de $ 2 billones entre utilidades y Adelantos Transitorios y cubrió el 90% del desequilibrio fiscal (el resto, con $ 210.000 millones de deuda colocada en el mercado local de capitales), que en buena medida se corresponde con un "gasto Covid" -programas como el Ingreso Familiar de Emergencia (IFE) y la Asistencia al Trabajo y la Producción (ATP)- equivalente al 4,9% del PBI.
Por el lado de los ingresos, la demora en la reapertura de algunas actividades contribuyó en el desplome de la recaudación hasta agosto, cuando se inició un ciclo de tres meses de alzas interanuales en términos reales.
"Programamos con mucho cuidado la política fiscal para que el déficit primario sea menor a 7%", indicaron en el Ministerio de Economía.
Allí argumentaron que la política fiscal fue "razonable". Esto es "expansiva en el momento de mayor crisis y tuvo un comportamiento más acorde cuando la economía empezó a dar signos de recuperación".
Además, en el Palacio de Hacienda anticiparon que las provincias finalizarán el año con equilibrio primario y un déficit financiero de apenas 0,1%, por lo que el desequilibrio total en el país llegaría a un 8,8% del PBI.