El "viento de cola" internacional sopló más fuerte en abril y ya suma U$S 3.000 millones adicionales
Esa 'ganancia' que se da por la suba de precios de la soja y otras materias primas se produjo en los últimos 6 meses, según el INDEC.
Casi el 60% de ese superávit comercial se explica porque los precios de las exportaciones subieron más que los de las importaciones.
Por sexto mes consecutivo, y con mayor fuerza en abril, el aumento de los precios internacionales – el llamado “viento de cola”- trajo más de US$ 3.000 millones adicionales a los exportadores y por esa vía, al Banco Central.
La explicación es que los precios de los productos que Argentina exporta, en especial, la soja y otros "commodities" vienen subiendo a un ritmo muy superior a los precios de las importaciones. Y esa mejora de los precios del comercio exterior, que comenzó en noviembre de 2020, en forma creciente produce lo que denomina “ganancia de los términos de intercambio”.
En estos primeros cuatro meses de 2021, las exportaciones aventajaron a las importaciones en US$ 4.001 millones. Casi el 60% de ese superávit comercial se explica porque los precios de las exportaciones subieron más (+16,3%) que los precios de las importaciones (+3,1%).
Entonces, si durante enero-abril se hubiesen registrado los mismos precios que en 2020, ahora el excedente comercial sería de sólo US$ 1.530 millones en lugar de los US$ 4.001 millones.
A esta diferencia de casi US$ 2.500 millones hay que sumar los casi US$ 500 millones de las "ganancias de intercambio" de noviembre y diciembre.
Este excedente comercial ayudado por los mejores precios internacionales, en gran parte permitió que en el cuatrimestre el Banco Central pudiera comprar en el mercado US$ 3.638 millones.
La soja explica gran parte de esa diferencia. El INDEC dice que “en este cuatrimestre las exportaciones de los principales productos relacionados con la soja y sus subproductos totalizaron 6.980 millones de dólares, con una suba de 82,1% en términos interanuales (3.146 millones de dólares)”.
Se exportaron mayores cantidades (+29,3%) pero los precios de exportación subieron un impresionante 40,4%.
“Respecto a los precios, aumentaron los correspondientes a todos los productos: aceite de soja (48,6%); porotos de soja, excluidos para siembra (46,6%); harina y pellets de la extracción del aceite de soja (37,7%); y biodiésel y sus mezclas (22,3%)”. agrega el informe del INDEC.
Lo que arrancó en noviembre-diciembre del año pasado como una brisa, ahora es un “viento de cola” que sopla muy fuerte. Solamente en abril la ganancia de intercambio fue de US$ 899 millones –récord de los últimos 6 meses- cuando en diciembre 2020 había sido de apenas US$ 140 millones.
En abril, el excedente comercial fue de U$S 1.410 millones. De acuerdo al INDEC, “el índice de precios de las exportaciones tuvo una suba de mayor magnitud (+ 25,2%) que el índice de precios de las importaciones (+ 5,8%)”. Y si hubiesen prevalecido los precios de abril 2020, el saldo comercial habría arrojado un superávit de U$$ 491 millones en lugar de US$ 1.410 millones.
No obstante, la “ganancia de intercambio” podría ser superior porque el INDEC señala que “el valor de las exportaciones de abril de 2021 fue estimado en forma provisoria debido a que 17,2% de la documentación aduanera oficializada durante este mes se encuentra aún pendiente; no fue cumplida ni anulada”.
De todos modos, a partir de fines de mayo se empezará también a notar la baja en las exportaciones de carne, a raíz de la prohibición que fijó el Gobierno.