Club de París: el mercado anticipó la prórroga y sigue atento a la negociación con el FMI
Las acciones y los bonos se recuperaron desde mínimos en las últimas semanas anticipándose a un guiño positivo de los acreedores internacionales.
Este lunes la bolsa de Nueva York no operará por feriado en Estados Unidos, por lo que el mercado local no tendrá referencia externa
Si bien el mercado da por descontado que este lunes la Argentina no saldrá a pagar los US$2.400 millones del vencimiento de deuda con el Club de París, la atención de los inversores estará puesta en los avances de la negociación del Gobierno con el organismo y con el Fondo Monetario de los próximos días.
Como este lunes la bolsa neoyorkina no operará por el feriado del Día de los Caídos en Estados Unidos, no habrá referencia externa en el mercado local para los bonos y las acciones.
En las últimas semanas, luego de la gira europea de Alberto Fernández, las acciones y los bonos argentinos ensayaron una cierta mejora. Los ADRs, por ejemplo, tuvieron saltos en mayo que llegaron al 30%. Si bien, el mercado espera que el Gobierno consiga aplazar la negociación de la deuda hasta después de las elecciones y postergar los vencimientos previstos para este año, sin caer en un nuevo default; las condiciones globales son las que le marcarán el ritmo a la recuperación de los precios de los activos argentinos.
"El mercado ya había marcado en precios que el Gobierno conseguiría una prórroga para el pago al Club de París desde hace dos semanas; hubo una fuerte reacción de las acciones y de los bonos, desde precios muy deprimidos. que también coincidió con una mayor llegada de capitales a la región a partir de la decisión del Banco Central de Brasil de convalidar tasas más altas. Esto traccionó fondos a la región y derramo un poco para la Argentina", explicó el jefe de estrategia de Inviu, Diego Martínez Burzaco.
Para su colega Leonardo Chialva, de Delphos, la reacción de las últimas semanas tiene más que ver con el escenario global que con la novela de la deuda externa argentina. "En un 80%, 90% tiene que ver con el contexto y el 10% restante con factores domésticos. Y esto puede seguir así, si se mantiene el escenario básico respecto al Club de París, que es que no le va a cobrar a la Argentina en medio de una crisis por la pandemia", dijo. "Latinoamérica es quizás la región más barata del mundo en este momento y Argentina entra en ese juego. Con mejores variables para la economía argentina por un rebote del precio de la soja, las señales fiscales y monetarias en la economía post pandemia son las variables a monitorear".
Los bonos en dólares presentan ganancias este mes, que llegan hasta el 6,6%, como en el caso del AE38. Así, el riesgo país, el indicador elaborado por el JP Morgan que mide la diferencia que pagan los bonos del Tesoro de Estados Unidos contra las tasas del resto de los países, logró alejarse del techo de los 1.600 puntos y se encuentra a los umbrales de junio más cerca de la marca de las 1.500 unidades.
"Si el aplazo que consiga el Gobierno en los vencimientos sólo se usa para ganar tiempo y no hacer nada respecto a las cuestiones de fondo, cualquier mejora será muy efímera", cerró Martínez Burzaco.
Vence el club de París y Guzmán acelera la negociación con el FMI
El ministro de Economía enfrentará a partir de esta semana 60 días de alto voltaje. En ese plazo, intentará arribar a un acuerdo con el FMI para evitar el default con el Club de París. La Argentina debía pagar este lunes US$ 2.400 millones, pero como eso no ocurrirá habrá dos meses de gracia para llegar a un arreglo.
En el Gobierno desdramatizan el escenario por delante y aguardan una respuesta favorable del Club de París, convencidos del "exitoso" resultado de la gira europea. "Mañana no hay pagos, se continúa negociando y en el lapso de 60 días en algún momento la idea es que se llegue a buen término", señalaron fuentes oficiales.
Guzmán ya pidió reprogramar los pagos y reducir las tasas, sin sufrir el pago de intereses punitorios. En 2019, se hizo un desembolso parcial, lo que gatilló un recargo del 9%. Y en 2020, se postergó la totalidad del vencimiento. Si se entrara en cesación de pagos, habrá además una penalidad extra por US$ 2.000 millones.
Pese al optimismo oficial, las negociaciones no serán fáciles. Si bien no se espera una visita del , porque Guzmán deberá obtener el visto bueno del Fondo. Sucede que Emmanuel Macron y Angela Merkel delegaron en Washington la tarea de evaluar la situación de la Argentina. Así, lo primero será aprobar el examen del staff de Kristalina Georgieva.
"Argentina tiene que entrar en negociaciones serias, no completarlas, pero negociar un programa con el Fondo", aseguró Claudio Loser, exdirector para el Hemisferio Occidental del FMI. En su opinión, implica aportar una "visión" con números y proyecciones sobre las finanzas, la política cambiaria, monetaria y un sendero de reducción del déficit fiscal.
El otro requisito, según Loser, sería un análisis de sostenibilidad de la deuda pública mediante el cual los técnicos analizan flujos de caja, vencimientos y condiciones de repago. El último ejercicio se hizo en marzo de 2020 a pedido del Ministerio de Economía y allí se advertía sobre la necesidad de reducir el déficit total al 5% del PBI en promedio y un máximo del 6%, la meta actual de Guzmán.
Las gestiones con Washington podrían plasmarse en una carta de intención o una declaración del staff. Luego, el Fondo elevará un informe a la entidad con sede en París para que el directorio defina. Las conversaciones deberán contar con el aval del ministro de Economía en medio las tensiones abiertas con el kirchnerismo.
Después de la carta del 25 de mayo, un informe del equipo de la diputada K Fernanda Vallejos advirtió este domingo que el plan de facilidades extendidas a diez años y una tasa de interés del 2% anual -que es lo que se busca acordar con el FMI, más la deuda con bonistas y otros organismos, "tornan imposible su pago”. Según ese cálculo, son US$ 4.800 millones al Fondo en 2021 y US$ 17.800 millones en 2022.
También genera fricciones el artículo IV, una auditoría que deben cumplir todos los países miembros del organismo, pero que la Argentina dejó de hacerla en 2019 cuando se interrumpió el acuerdo Stand By por el que se adeudan US$44.000 millones. Guzmán ve con buenos ojos esas consultas, algo que irrita al kirchnerismo en un año electoral.
"Hay alguna indicación de miembros del Club de París de que Argentina tiene que ponerse a trabajar más seriamente con el Fondo, no solo pasar por cuestiones declarativas, sino incorporar alguna sustancia y eso empieza con el llamado artículo IV", aseguró Daniel Marx, secretario de Finanzas entre 2000 y 2001 y negociador de la deuda entre 1988 y 1993.
Argentina es uno de los ocho países con una demora de más de 18 meses en completar esa consulta, junto a Venezuela, Siria, Yemen, Libia, Guinea Ecuatorial, Guinea y Burundi. Por lo pronto, desde el Fondo, enviaron una señal en las últimas horas. "Continuamos manteniendo un diálogo estrecho, pero no hay planes para una misión en este momento", señalaron fuentes del organismo.