Qué oportunidades ve el mercado ante el inicio de baja de tasas de la FED
Se espera que la Fed realice el Pivot en la política monetaria en 2024 y que las tasas dejen de subir para comenzar a bajar el año que viene. Anticipándose al ciclo, el mercado ve oportunidades de inversión en distintos activos.
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Se espera que la Fed realice el Pivot en la política monetaria en 2024. Es decir, que las tasas dejen de subir para comenzar a bajar el año que viene.
Esto tiene consecuencias en todos los mercados, tanto de bonos como de acciones. Incluso, tendrá un impacto en lo local.
En este contexto, el mercado ve oportunidades en renta fija y en acciones de manera selectiva. Los activos locales podrían verse beneficiados y el mercado pone el ojo en los bonos argentinos.
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Rumbo al Pivot de la Fed
La semana pasada, la Fed mantuvo su tasa de interés sin cambios, dejándola en el rango de 5% y 5,25%.
Además, en su diagrama de puntos en el que se proyecta la expectativa de las tasas para el futuro, los miembros de la Fed proyectaban dos subas más de 25 pb para este año y un descenso de 100 puntos básicos para 2024.
Esto implica que la Fed está viendo de cerca el final del ciclo de suba de tasas y que muy probablemente la Reserva Federal implemente un pivot en su política monetaria, desde un sesgo contractivo (tightening), hacia un sesgo laxo (easing monetario).
La expectativa de la Fed de elevar hasta 50 puntos básicos más la tasa para luego comenzar el ciclo de baja de tasas va en línea con lo que espera el mercado.
La única diferencia es que los inversores solo esperan que la Fed suba una sola vez más la tasa, para luego comenzar el ciclo bajista en la misma hacia 2024.
El banco de inversión americano, Goldman Sachs, pronostica que la tasa hará pico en el rango de 5,25% y 5,5%, para luego comenzar a bajar hacia el 4,25% y 4,5% para 2024.
Esto es menos agresivo respecto de lo que espera el mercado, que anticipa una tasa de la Fed que alcanza su pico en el rango de 5,25% y 5,5% en noviembre, para luego bajar al rango de 3,5% y 3,75% para fin de 2024.
Más allá de los diferenciales en las proyecciones, el gran consenso del mercado es que el final en la suba de tasas está muy próximo de concretarse.
Esto no es menor para las inversiones ya que la Fed va a aplicar un pivot en su política monetaria y generará fuertes cambios en la dinámica de los activos financieros.
En ese entorno, será clave encontrar las oportunidades, aunque más importante es poder anticiparse a ellas.
Oportunidades en bonos
Debido a la suba de tasas de la Fed, el mercado incorporó elevados riesgos de una recesión en EEUU.
La política monetaria contractiva implicó una intención por parte del banco central americano de querer enfriar la economía con la intención de bajar la inflación.
Hacia adelante, el mercado anticipa elevadas chances de ver una recesión.
La curva de bonos del tesoro americana se muestra altamente invertida, lo cual refleja elevados riesgos de ver una recesión.
En ese contexto, los analistas comienzan a ver una oportunidad en invertir en activos de renta fija dado que las acciones podrían sufrir ante una eventual desaceleración económica.
Los analistas de Criteria explicaron que crecen los riesgos de una recesión luego de la suba de tasas de la Fed.
"Según antecedentes históricos, la recesión en EE.UU. se produce de hecho entre dos y tres años después del proceso de suba significativa de las tasas de interés. A su vez, esta caída de actividad efectivamente termina por ahogar el elemento inflacionario, reduciendo en 7% (promedio) la tasa anual de inflación desde el pico previo hasta el mínimo post recesión", dijeron.
Por lo tanto, y yendo a las inversiones, desde la compañía agregaron por lo general, los bonos de corto plazo tienden a ser el mejor instrumento cuando se desacelera la actividad económica y entramos en una fase de recesión.
"Más allá de la experiencia histórica, las valuaciones relativas también parecen determinar un entorno más favorable para la renta fija que para las acciones. En lo particular, privilegiamos la deuda de grado de inversión (alta calidad), por sobre High Yield o alto rendimiento. En cuanto a renta fija emergente, creemos que las valuaciones siguen siendo atractivas a estos niveles de rendimiento", dijeron desde Criteria.
Nicolás Kohn, Head Wealth Management Research en Balanz, remarcó que el mercado proyecta que la Fed está cerca del ciclo de suba de tasas.
"Para 2024 el mercado está incorporando cerca de 150 puntos básicos de cortes en la tasa de política monetaria de la Reserva Federal, mientras que las mismas proyecciones de los miembros de la Reserva Federal apuntan a recortes de 100 puntos básicos", dijo.
En ese sentido, Kohn agregó que en el final de los ciclos de subas de la Fed (particularmente desde fines de la década de los 80s) es que las tasas de interés suelen empezar a caer al unísono en anticipación al futuro ciclo de cortes.
Por ello, el especialista ve oportunidades en bonos del Tesoro americano o en deuda de grado de inversión.
"Asumiendo que la Fed ajusta su tasa de política monetaria una vez más en 25bps en los próximos meses y termina el ciclo (vemos menos probable que se materialicen dos subas adicionales de 25pbs este año), creemos que una de las mejores formas de capturar la próxima etapa del ciclo de tasas es agregando duración en los portafolios, principalmente en Estados Unidos ya sea vía bonos del tesoro o compañías con grado de inversor y con sólidos balances", detalló Kohn.
Mercado de acciones
Por otro lado, yendo al mercado de acciones, allí también puede haber oportunidades, aun con los riesgos recesivos de fondo.
Una baja en las tasas de interés tiende a favorecer en especial a las acciones más sensibles al accionar en la política monetaria de la Fed. Estos sectores tienden a estar más asociados al sector tecnológicos.
En cuanto a las acciones, Damián Vlassich, analista Senior de Equity de IOL Invertironline señaló que es evidente que el sector tecnológico sería uno de los principales beneficiados ante una postura de carácter más dovish por parte de la Reserva Federal.
"Un posible pívot de tasa (situación a la que el mercado está dando cada vez una mayor probabilidad de ocurrencia) permitiría continuar dinamizando los sectores denominados growth. Además, las empresas tecnológicas, aun considerando la recuperación experimentada durante la primera mitad del año, desde el punto de vista de valuación, todavía se encuentran lejos de los máximos en ratios de referencia, por lo que continúan siendo interesantes para el largo plazo", dijo Vlassich.
En cuanto al análisis de otros sectores, Vlassich agregó que el financiero es otro que podría resultar atractivo para el mediano plazo.
"Ante una coyuntura de tasas altas (pero estables), y con un nivel de actividad económica que logre eludir la recesión, los bancos estarían ante una situación favorable que les permitiría continuar dinamizando sus ingresos", comentó el especialista de IOL InvertirOnline.
Impacto en Argentina
Las oportunidades ante un ciclo de bajas de tasas también ser priceadas desde lo local.
Los activos argentinos son considerados de alto rendimiento, tanto en los bonos como en las acciones.
Por lo tanto, si la Fed baja la tasa y los bonos a nivel global comienzan a rendir menor, los inversores van a verse empujados a buscar activos con mayor riesgo para posicionarse y obtener retornos más elevados.
Allí, los mercados emergentes tienden a verse favorecidos, y en ese caso, la Argentina podría ser beneficiada de un Pivot de la Fed y un ciclo de relajación monetaria global.
Gastón Sempere, analista de Research Mariva, explicó que el contexto para los países emergentes siempre se ve influido por las decisiones de la Fed, que afectan el rendimiento de los bonos del Tesoro, el dólar, y el precio de los commodities.
Sin embargo, considera que en esta oportunidad, los activos locales podrían verse beneficiados.
"Con el rendimiento de los bonos del Tesoro a 10 años en niveles máximos de la última década (3,7%), un estímulo económico de China menor a lo esperado, y la continuidad de la guerra en Ucrania, creemos que los activos de países emergentes aún enfrentan riesgos este año. No obstante, Argentina se encuentra afortunadamente aislada por su dinámica electoral, que pareciera encaminarse hacia un cambio de ciclo político positivo para los bonos y acciones", dijo Sempere.
En ese sentido, Sempere ve potencial alcista mayor para la deuda argentina
"En 2024, si la Fed consigue dominar la inflación y reduce las tasas de interés, y el nuevo Gobierno en Argentina comienza a realizar las reformas estructurales demandadas por el FMI y el mercado, es posible que los bonos argentinos logren una mayor compresión en sus diferenciales de rendimiento que el resto de los bonos de la región", remarcó el analista de research de Banco Mariva.
Por el lado de argentina, Vlassich remarcó que una Reserva Federal menos agresiva claramente es un escenario potencialmente positivo para Argentina.
"Una posible baja en las tasas de interés favorecería los flujos a activos en países más riesgosos, es decir, el efecto inverso al "fligh to quality" que experimentamos principalmente durante 2022", sostuvo.
Rodrigo Benitez, economista jefe de MegaQM, remarcó que en base a la curva de bonos del tesoro americano, el mercado espera con alta probabilidad de ocurrencia que la tasa de referencia que hoy está en 5,25% baje a niveles del 4% para el período que va de mediados de 2024 a mediados de 2025.
De esta manera, el economista jefe de MegaQM se muestra optimista sobre el futuro de los activos hacia adelante.
"El nivel de estas tasas es el principal factor que conforman las tasas de descuento que se utilizan para valuar diferentes activos. Por eso un nivel de tasas más bajo debería ayudar a ver mayor valor en los activos de mayor plazo (deuda privada), ya que es donde la tasa tendrá más efecto", detalló Benítez.
En ese sentido, Benitez afirmó que un sector para mirar con atención es el de deuda emergente tanto pública como privada.
"La deuda emergente se vio castigada en el proceso de suba y que podría aprovechar el proceso de recorte de tasas. El rédito puede ser mayor si además se produce algún descalce de tasas que lleve al fortalecimiento de otras monedas", comentó.
Para el caso puntual de Argentina, Benítez agregó que la clave pasa por los tiempos.
"El Tesoro deberá salir a renovar vencimientos de deuda en dólares por bajo monto a fines de 2024 y por volúmenes más altos ya en 2025. Claramente, no es lo mismo salir a colocar deuda con una tasa corta de la Fed en 5,25% que hacer con esa tasa en 4% o 3,25%. Cuanto menor sea esa tasa más factible será para Argentina lograr acceder a ese mercado de crédito y lograr precios razonables", afirmó.