Por la positiva, vamos con el acuerdo entre el Mercosur y la Unión Europea. Y vamos con la ley de financiamiento productivo y el apoyo a las pymes. Pero el impuesto a la renta financiera ahuyenta inversores y no sirve para recaudar?.
Esta será la queja que presentará mañana a las 19 Adelmo Gabbi. Pese a que en la invitación por el 165° aniversario de la Bolsa de Comercio (fue fundada el 10 de julio de 1854) dice que la cita es a las 18, la llegada de Mauricio Macri está prevista para las 19. Claro que hay que llegar antes, porque una vez que entra el presidente de la Nación, se cierran las puertas y nadie más puede ingresar, por lo que recomiendan estar 18.30 a los más de mil asistentes que se prevé que asistan, que estarán divididos en tres clases.
Como si fuera un avión que tiene first class, business y turista, Gabbi tiene tres tipos de invitaciones distintas para repartir. En rigor, son todas iguales, aunque lo que cambia es el color. La turista sólo da acceso a la planta baja, mientras con la business se puede ir hasta el VIP del primer piso, donde es costumbre que el Presidente pase a saludar antes de bajar al recinto.
Claro que si van los 600 VIP que repartió Gabbi, entrarán un tanto apretujados en el salón. La mejor invitación es la súper VIP, que da acceso a la sala de Consejo, donde hay una mesa gigante que no se puede mover, por lo que estará a full si van los dueños de las 120 tarjetas repartidas entre la elite del empresariado y las más altas autoridades de los Poderes Ejecutivo, Legislativo y Judicial; representantes de gobiernos provinciales, municipales y embajadores.
Mañana Macri tiene agenda previa y posterior, por lo que pidió que se vuelva al formato tradicional de discurso, y no del living del año pasado. Por una cuestión de protocolo, la Bolsa invitó a toda la oposición, incluida Cristina Kirchner y Alberto Fernandez, aunque no creen que asistan. Un clásico de los clásicos en el discurso adelmista es el pedido de ajuste por inflación. ¿Lo volverá a pedir este año?
Porque el próximo Gabbi no podrá pedirlo, ya que por estatuto se le vence el mandato como consejero, entonces deberá descansar un año, y en abril próximo deberán elegir otro presidente. Se recambiará un tercio del consejo, y luego el consejo en pleno elegirá la nueva mesa directiva.
Gabbi ya tiene al elegido in péctore: será un hombre de su extrema confianza, de modo que al año siguiente no se quiera quedar (como había ocurrido con Héctor Orlando), sino que le cuide el sillón presidencial. Por eso, cuando este año quien fuera el secretario de la Bolsa, Guillermo Carracedo, fue nombrado vicepresidente primero, todos lo felicitaron, porque sabían que había sido elegido como el sucesor.
Consultado por este diario si se postulará devuelta como presidente, Orlando dijo: Estoy en un año de descanso sabático de la Bolsa, ya que por reglamento no podemos estar más de 6 años por cual este año no estoy. Para el jueves veo las cosas con optimismo y va a ser un acto del tipo de los anteriores pero no dudo que el Presidente aproveche para hacer un poco de campaña.Para el año próximo con toda la experiencia de Gabbi y con su apoyo, con seguridad se formará un grupo de trabajo para ese período y espero poder ser parte de ello?.