Después del shock devaluatorio de 2018, el déficit de la cuenta "Viajes y Turismo", una de las canillas que explicaba en buena parte el éxodo de dólares del país, comenzó a corregirse. Con un tipo de cambio que saltó 100% el año pasado, los argentinos comenzaron -a la fuerza- a moderar sus gastos en el exterior.
Durante los primeros seis meses de este año, la demanda de dólares para Turismo y gastos en el exterior alcanzó los u$s 3375 millones. Esto representa un 39% menos de lo que se había registrado en el primer semestre del año pasado, en los meses previos a la crisis. Para junio de 2018, este ítem acumulaba un rojo anual de u$s 5535 millones.
Esto sin contar los ingresos de divisas que realizaron turistas extranjeros en el país. Ahora, si se toma el resultado total de la cuenta, el déficit al mes de junio alcanzó los u$s 379 millones, u$s 13 millones menos que en el mes de mayo, y casi un 20% menos de lo que había registrado en el mismo mes del año anterior.
"Este ítem suele estar muy correlacionado al tipo de cambio real bilateral, de manera que apenas el tipo de cambio comienza a exhibir algunos signos de debilidad, los consumidores argentinos elevan sus gastos en viajes y otros pagos con tarjeta en el exterior", explicaron en la consultora ACM.
No todos los gastos de argentinos más allá de las fronteras tienen que ver con viajes o compras presenciales fuera del país. También aparecen en esta cuenta los gastos en plataformas internacionales como Spotify, Google Pay o Twitch. Otro de los puntos que se contabilizan aquí es el de las compras "puerta a puerta", es decir, e-commerce que no está vinculado a un viaje.
Sin embargo, estos datos están muy en línea con los que recolecta el Indec en su informe sobre Estadísticas sobre Turismo Internacional. Si bien el último disponible corresponde al mes de mayo, ahí puede verse que las salidas internacionales cayeron un 16,3% respecto respecto al movimiento que se veía en Ezeiza doce meses antes.
Si bien la corrección de esta cuenta es significativa, no alcanza para sanear el rojo. La demanda de divisas para turismo sigue siendo muy alta en comparación con las que ingresan al país por la llegada de visitantes extranjeros. Por ejemplo, a junio los egresos por "Viajes y otros pagos con tarjetas" alcanzaron los u$s 492 millones, mientras que por la misma razón se acreditaron u$s 124 millones.
Entonces, la gran incógnita es si hay margen para seguir corrigiendo esta brecha en lo que queda del año, sin un nueva caída abrupta del peso. "Hacia adelante, si el tipo de cambio real se sigue atrasando, en un contexto de estabilización del dólar, pero con una inflación inercial en la zona del 2,5%, le va a costar en ese escenario seguir corrigiéndose y más si hay pasajes que todavía se financian en cuotas", afirmó el economista y directori del Estudio EcoGo, Federico Furiase.