Tras haber alertado sobre los peligros que encierra la fragil situación política y económica que vive argentina sobre sus activos,la calificadora de riesgo Moody´s adelantó que el costo de las medidas que tomó el presidente Mauricio Macri para morigerar el impacto de la devaluación de la semana pasada será muy alto, tanto a nivel fiscal para las provincias, como a nivel financiero para empresas, especialmente las que se dedican a la explotación y comercialización de petróleo y gas.
La calificadora puso el ojo en dos de las principales medidas anunciadas por el Gobierno la semana pasada: la quita del IVA a los alimentos y el congelamiento de las tarifas de combustibles. Respecto a lo primero, advirtió ayer que, aunque sea temporal, ya que la medida sólo regirá hasta fines de diciembre, "los recortes propuestos son negativos para las provincias, porque reducirán la cantidad de transferencias que el Gobierno federal les hace, en un año de por si complejo, con una baja de 1,5% en la economía".
La alerta de Moody´s está en línea con el reclamo que los gobernadores le hicieron al Gobierno en las últimas horas, ya que advierte que el IVA representa cerca de la mitad de los impuestos que la Casa Rosada comparte con las provincias. "Las transferencias federales son la principal fuente de ingresos para la mayoría de los gobiernos regionales de Argentina, y en gran medida no tienen comparación con los ingresos de origen propio, que también esperamos que disminuyan a medida que la economía se contraiga por el resto de este año", aseguraron.
Moody´s había anticipado la semana pasada que seguía de cerca la evolución de los sucesos post PASO en la Argentina, para realizar una eventual revisión a la baja de su calificación, luego de la correción que hizo en julio último. Ahora, hizo énfasis en la reducción de las arcas de las gobernaciones: "El contexto de alta inflación, volatilidad financiera y un endurecimiento de las condiciones financieras amenaza con crear riesgos sistémicos para los gobiernos provinciales, que resultan en disminuciones de sus ingresos y un acotado acceso al financiamiento en los mercados".
Al mismo tiempo, la calificadora anticipó que las consecuencias del comgelamiento de precios para los combustibles pueden ser negativas para las empresas del sector. El viernes pasado, el Gobierno instrumentó una pausa en el aumento de los precios de hidrocarburos, para contener el salto inflacionario que generará la disparada del dólar de más de 20% que se registró luego de las elecciones primarias.
Sin embargo, la medida no contó con el respaldo de las compañías del sector ni de las provincias afectadas. Por ejemplo, Vista Oil & Gas, del ex CEO de YPF, Miguel Galuccio ya presentó un amparo y amenazó con limitar su actividad en Vaca Muerta.
Moody´s se puso de su lado: "La nueva medida aumenta los peligros del tipo de cambio para productores de crudo y refinerías y debilita la liquidez de las compañías, ya que reduce el flujo de caja que estas generar y lo que es peor, su capacidad de pagar deuda tomada en dólares", dijo en un duro reporte.
